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Los cambios sociales y poli­ticos en Venezuela “no tienen vuelta atrás”

13. August 2004

General Rafael Horopesa

El referà©ndum, fundamental para los pobres, señala el general Rafael Horopesa

Los cambios sociales y polà­ticos en Venezuela “no tienen vuelta atrás”.
Con el programa Mercal la Corporacià³n Agraria distribuye toneladas de comida a bajo precio.

Stella Calloni enviada
12 de agosto de 2004

(fonte: Resumen Latinoamericano)

Caracas, 11 de agosto. En Venezuela se viven momentos muy especiales porque se han producido cambios profundos, en lo social y polà­tico, de los que no se vuelve atrás, sostiene el general Rafael Horopesa, titular de la Corporacià³n Venezolana Agraria. Por eso, subraya, el referà©ndum sobre el mandato del presidente Hugo Chávez tiene importancia para toda Amà©rica Latina en estas circunstancias y es fundamental para las mayorà­as pobres venezolanas que por primera vez tienen la posibilidad de vivir con dignidad.

El general de brigada Horopesa, como militar que es, no desconoce los peligros que rodean a su paà­s y a lo que considera “el mayor esfuerzo democrático” en favor de los que han estado excluidos de la vida polà­tica nacional.

“Las fuerzas armadas venezolanas difieren de otros ejà©rcitos del continente porque no proceden de sectores de altos ingresos, de las clases medias y altas. Están conformadas por mujeres y hombres del pueblo. Tienen igual oportunidad. Y por sus orà­genes están identificadas con las mayorà­as y se les hace difà­cil actuar contra la poblacià³n”, declara a La Jornada.

Horopesa -a cargo de la distribucià³n de miles de toneladas de alimentos por mes, mediante redes sociales en todo el paà­s, lo que permite el acceso a productos baratos a millones de venezolanos, entre otras tareas -destaca además la participacià³n de los militares junto a la poblacià³n y la capacitacià³n de la mayorà­a, que tiene carreras tà©cnicas o universitarias.
“Son muchas las diferencias que existen con fuerzas similares, pero este proceso nos ha enseñado lo que nadie podrà­a aprender si no camina junto a los pueblos”.

Los militares que trabajan en estas redes sociales han participado en los acuerdos del gobierno con otros paà­ses y comparten la idea de la integracià³n regional, “mucho más allá de lo simplemente comercial. Tenemos un camino abierto por primera vez hacia dentro y hacia afuera”.

Considera, asimismo, que más allá de las amenazas que rodean a su paà­s y de los planes que se han trazado en diversos sectores para impedir el avance de los proyectos en favor de la poblacià³n más humilde, existe en Venezuela un “antes y un despuà©s” sin retorno en cuanto a conciencia de las mayorà­as.

“Más allá de las amenazas internacionales, el peligro mayor para un proyecto democrático y en favor de los pueblos, es la desigualdad social, la injusticia, lo que estimula la violencia, lo que no deja crecer independiente a un paà­s”.

Como señala este joven general de brigada, “nosotros seguimos trabajando, porque lo que es real es lo que está sucediendo y en esto tenemos en avance en todos los planes y las misiones propuestas. Los mercados populares (Mercal) mejoraron sin duda la calidad de vida de la poblacià³n. La Corporacià³n Venezolana Agraria cubre ya los alimentos básicos de entre 30 y 40 por ciento de la poblacià³n, lo que significa millones de toneladas mensuales. No hay otra empresa que maneje ese volumen”.

Explica que no sà³lo se trata del Mercal, sino que se han desarrollado otros proyectos como los “mercalitos” donde se venden alimentos muy por debajo de los precios del resto de comercio, asà­ como las casas de alimentacià³n gratuitas para atender “el drama de los niños abandonados y todos aquellos que por problemas fà­sicos no pueden trabajar. Son redes y redes de personas ya incorporadas a una actividad que además es solidaria.”

El llamado Mercal Máxima Proteccià³n, para los sectores más empobrecidos ya protege a unos 500 o 600 mil habitantes con alimentos al 50 por ciento de su valor.

Pero el general Horopesa, quien fue enviado para erradicar la corrupcià³n en la Corporacià³n Venezolana Agraria -objetivo que ya lo logrà³- estima que la Misià³n Zamora, destinada de alguna manera a “sembrar el petrà³leo” y producir alimentos por primera vez en Venezuela, ya está comenzando a dar resultados alentadores con la siembra de maà­z y arroz por parte de pequeños y medianos productores, lo que está provocando “una transformacià³n en sectores rurales”.

Tambià©n por primera vez se están formando tà©cnicos y universitarios entre los sectores populares y en un año de Misià³n Robinson más de millà³n y medio de habitantes de distintos puntos del paà­s han sido alfabetizados y en el corto plazo la cifra llegará a más de 2 millones. “Es una verdadera revolucià³n, si se tiene en cuenta todo lo que sucedià³ en estos años”. Se refiere al golpe militar de 2002, al paro petrolero y otras acciones que finalmente no pudieron desestabilizar al gobierno de Hugo Chávez.

Señala que es la primera vez que los campesinos, muchas veces perseguidos en su paà­s, pueden llevar adelante estos proyectos. “Era imposible para ellos alcanzar un crà©dito porque no tenà­an acceso a la tierra, y ni siquiera podà­an poner garantà­as. Ahora sà³lo traen sus documentos y su decisià³n de trabajar y para eso están las Leyes de Tierra y otras. Todo esto, por supuesto está muy bien controlado para evitar cualquier tipo de corrupcià³n. Por eso hablo de cambios profundos. Como tambià©n sucede en salud con la Misià³n Barrio Adentro. Eso es en todo caso lo que habla de un proceso democrático real, y serà­a muy difà­cil que los que han conocido ahora la posibilidad de una vida distinta, y que son las mayorà­as antes abandonadas a su suerte, acepten regresar al pasado, dice el general Horopesa finalmente.

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