Site-Logo
Site Navigation

Saludo de Navidad desde la Cárcel

26. December 2004

por Luz Perly Cà³rdoba

Oye… te hablo desde la prisià³n… “A mis amigos les adeudo la ternura y las palabras de aliento y el abrazo, el compartir con todos ellos la factura que nos depara la vida paso a paso” (A. Cortà©s)

Queridos amigos y amigas, compañeras y compañeros, les escribo estas cortas pero sentidas palabras salidas de los más hondo de mi corazà³n, el cual, a pesar de las enmohecidas murallas y de las herrumbrosas cadenas con que se me quiere aprisionar, hoy late más libertario que nunca.

Encarcelar las rosas y los lirios del jardà­n de la patria libre es el sueño vano de los apátridas de turno, que en su delirio criminal pretenden acallar la voz de un pueblo que no renunciará jamás a sus sueños de una autà©ntica paz con justicia social para Colombia. ¿Quià©n encadena un corazà³n libre? ¿Quià©n amordaza la voz de un pueblo? ¿Quià©n corta las alas a la libertad cuando es el sueño de toda la patria?

Los herederos del vetusto y leguleyo Santander encarnados en la oprobiosa fiscalà­a colombiana, hoy se hallan parapetados tras las anacrà³nicas leyes de la injusticia especializada, desde allà­, se han dado a la arbitraria tarea de infringir dolor a nuestro pueblo, en nombre de la democracia y la justicia clasista que representan. La carcomida boca Temis exhala un halo mortecino de prevaricato y sus ojos se hallan cubiertos por un velo cegador que le han colocado sus mancilladores para impedirle ver la realidad de nuestro dolido paà­s. Cientos de expedientes prefabricados y miles de folios mentirosos, son parte de los adefesios jurà­dicos con que hoy se nos quiere sepultar
tras las rejas de la prisià³n, por el único crimen de atrevernos a luchar por nuestros derechos y los de nuestros compatriotas.

Queridos compañeros y compañeras, en estas à©pocas de amargas festividades y fin de año, mientras en unos pocos hogares de Colombia disfrutan de la opulencia mezquina de banquetes y francachelas, millones de colombianos no cuentan con un plato de comida para mitigar el hambre cotidiana, mientras un à­nfimo grupo de niños ricos se aprestan a disfrutar de todo tipo de juguetes, miles de niños en campo sà³lo conocerán la navidad de azadà³n y la pala, en las ciudades millares de niños continuarán vendiendo dulces en los buses o pidiendo limosna en los semáforos.

Mientras los medios masivos de desinformacià³n de la oligarquà­a colombiana nos presentan el paà­s feliz de la “seguridad democrática”, de reinas prefabricadas, de fútbol masificado y de circos de paramilipaz, tres millones de desplazados deambulan con su casa al hombro; mientras tanto, el Gobierno titula las tierras de los campesinos a las bandolas de paramilitares que los sacaron a punta de motosierra de sus terruños. Mientras todo esto ocurre, el Gobierno acaba por decreto los hospitales, privatiza las empresas más rentables del Estado, despilfarra el presupuesto nacional en gastos militares, se incrementan los impuestos y terminan los pocos subsidios, pero no contento aún con todo esto, se da a la tarea de subastar el presente y futuro del paà­s con la firma del ALCA y el TLC.

Mientras tanto, millones de campesinos, indà­genas y trabajadores continuamos viviendo en la absoluta pobreza econà³mica, ante la mirada indolente de un rà©gimen que se empeña en plagarnos de miseria mientras se arrodilla complaciente a los intereses del imperialismo norteamericano. Todo esto en desarrollo de la inaceptable campaña de reeleccià³n de Uribe Và©lez.

Queridos amigos y amigas, a pesar de la horrible noche que hoy nos cubre, envà­o desde aquà­, desde la prisià³n, una voz de aliento a todos los presos y presas polà­ticas de Colombia y el mundo, los invito a no desfallecer ante las oprobiosas condiciones que hoy se nos imponen, a continuar con la frente y la moral más alta que nunca, sà© en carne propia que la obligada ausencia de los seres y amigos queridos lacera las fibras más profundas de nuestros corazones, pero la generosidad de nuestros sacrificios no será en vano. No tenemos nada que perder, por el contrario todo está por ganar.

A nuestros amados hijos, a nuestros padres y compañeros, les ofrecemos nuestras lágrimas y sufrimientos, pero ante todo, nuestro ejemplo valeroso de dignidad y patriotismo en estas horas de profunda amargura.

Envà­o un fraternal y efusivo saludo de fin de año, a todos aquellos amigos, compañeros y organizaciones nacionales e internacionales que se han solidarizado y han acompañado mi causa que no es otra que la del sufrido pueblo colombiano, los invito a continuar acompañándonos con su calor y aliento solidario, esa compañà­a no la detiene ninguna muralla, ni la encierra ningún candado.

Segura estoy de que vendrá un nuevo año donde aspiro a compartir con todos y todas ustedes las múltiples tareas para continuar luchando por ver florecer en Colombia una nueva primavera llena de luz para todos.

“Un barco frágil de papel parece a veces la amistad pero jamás puede con à©l la más violenta tempestad, porque ese barco de papel tiene aferrado a su timà³n por capitán y timonel… Un corazà³n”.

Fraternalmente.

Luz Perly Cà³rdoba
Dirigente campesina y defensora de derechos humanos
Presa polà­tica colombiana
Patio 6…º Cárcel Buen Pastor, Bogotá, Colombia

17 de diciembre de 2004

Topic
Archive