por Al Jazeera.net
(Traduccià³n CSCA)
Fuentes palestinas afirmaron que Barghuthi fue detenido por efectivos de la policàa de frontera fuertemente armados, y que fue conducido al complejo penitenciario sito en Jerusalà©n Oeste. Otro candidato, Bassam al-Salhi del comunista Partido Popular, tambià©n fue maltratado y detenido tras intentar entrar en Jerusalà©n sin permiso.
La policàa israelà arrestà³ al candidato presidencial palestino cuando à©ste hacàa campaña electoral en Jerusalà©n, según testigos, en el último incidente orientado a obstaculizar el proceso electoral a la sucesià³n de Yasir Arafat.
Ayudantes de Mustafa Barghuthi declararon que fue arrestado mientras se reunàa con palestinos del casco antiguo de Jerusalà©n, ocupada por Israel desde la guerra árabe-israelà de 1967 y anexionada como capital en una maniobra no reconocida internacionalmente.
Fuentes palestinas afirmaron que Barghuthi fue detenido por efectivos de la policàa de frontera fuertemente armados, y que fue conducido al complejo penitenciario sito en Jerusalà©n Oeste.
“La policàa le dijo: `Tenemos una orden de arresto contra Usted`, y se lo llevaron a rastras”, afirmà³ Ihad al-Jariri, director de campaña del candidato independiente.
La policàa israelà no hizo comentario alguno sobre el arresto, el segundo incidente de estas caracteràsticas para Barghuthi, uno de los siete palestinos que concurren el 9 enero a las elecciones presidenciales en Gaza y Cisjordania.
A principios de mes, Barghuthi denuncià³ que efectivos israelàes lo habàan maltratado, apaleado y detenido por un tiempo en un puesto de control militar a las afueras de la ciudad cisjordana de Jenin.
El ejà©rcito alegà³ que Barghuthi y su equipo se habàan negado a someterse a un registro rutinario del automà³vil.
Acoso
Otro candidato, Bassam al-Salhi del comunista Partido Popular, tambià©n fue maltratado y detenido tras intentar entrar en Jerusalà©n sin permiso.
Aunque con temor en lo relativo a posibles movimientos de combatientes de la resistencia palestina, Israel ha dado su palabra de bajar la presià³n en Cisjordania y Gaza para que los candidatos puedan moverse libremente. Sin embargo Jerusalà©n permanece bajo jurisdiccià³n sensiblemente especial.
Làderes israelàes abogaron por no permitir a los candidatos palestinos hacer cualquier tipo de “declaraciones electoralistas” en lugares públicos y abiertos de Jerusalà©n, para afirmar asà las exigencias israelàes de soberanàa sobre la ciudad ocupada.
Los palestinos quieren que la ciudad santa sea la capital compartida de su estado futuro. Israel niega esa posibilidad, pero afirma que los palestinos de Jerusalà©n Este pueden tomar parte en las elecciones como votantes ausentes